Es el beneficio más visible del Pole, y así se puede ver en los brazos, hombros, abdomen y piernas de las chicas (y chicos) que lo practican. Además, al ser un ejercicio funcional, el aprendizaje y los nuevos trucos van acompañados del aumento de la resistencia muscular. Aunque sólo sea por el cuerpazo… ¡merece la pena intentarlo! ¿No lo has hecho porque no tienes fuerza? No necesitas fuerza para empezar, necesitas ganas. La fuerza la vas adquiriendo con la propia práctica. Poco a poco la irás generando con los ejercicios básicos de la clase.
En las primeras sesiones se trabajan los giros y figuras en la barra sin tener que escalar, y con ello te irás acostumbrando a la barra y generando la fuerza de forma natural para poco a poco lograr los ejercicios cada vez más arriba. Con las primeras figuras no sólo vas adquiriendo la fuerza, sino perdiéndole el miedo a la barra, a la altura y a lo duras que somos a veces con nosotras mismas.

que es sinónimo de juventud. ¿Cómo te mueves, con gracia y de manera elástica o parece que te vas a romper cuando te agachas? El Pole te ayuda a mantenerte joven y dinámica. El trabajo de estiramientos y flexibilidad enfocado a lograr figuras más estéticas y artísticas en la barra, pero en realidad te servirá para mejorar tu dinamismo día a día, en tu vida cotidiana. La suma de la fuerza con la elasticidad hará que vayas logrando mejorar tus trucos en la barra.
Pero además, la flexibilidad es fundamental para nuestra salud. Mejora nuestra postura, nos previene de lesiones, nos previene de dolores en la espalda baja, los hombros y el cuello y mejora nuestro riego sanguíneo. No sólo eso, también nos ayuda a recuperarnos más rápidamente del cansancio muscular, lo que significa que te ayudará no sólo en el Pole, sino en cualquier otro deporte que practiques y en cualquier aspecto de tu vida.

Siempre miramos con admiración, respeto y un poco de envidia a los acróbatas, a todos esos que parecen tener un control absoluto de su cuerpo y una expresión corporal casi perfecta. Iniciarte o perfeccionar en el Pole te llevará a caminar hacia esos movimientos, hacia esa sensación de libertad y arte del cuerpo. Por supuesto, requiere de muchísimo esfuerzo, de disciplina y de un montón de variables y el punto de partida e historial son importantísimos.
Pero con el Pole Dance Fitness los límites los marcas tú… pero no te preocupes, en clase empezamos con movimientos acrobáticos nivel 0 para ir avanzando hasta llegar… ¡a lo que te propongas!

El factor genético es importante para el Pole Dance, pero lo es más si cabe lo que se consigue con su práctica diaria. Por eso, independientemente de si naciste con habilidades privilegiadas o te cuesta la expresión corporal, el Pole Dance es un diamante en bruto para ti. El Pole Fitness es acrobacia en una barra vertical, movimientos dinámicos que te harán ganar destreza.

Vivimos en una sociedad de clichés, de estereotipos de belleza, que hace que en ocasiones nos sintamos acomplejadas. El Pole Dance nos ayuda a querernos, a aceptarnos y desde esa aceptación empezar a mejorar, pero sin buscar algo que no somos. En el Pole hay tantos tipos de cuerpo como personas.
Cuando vamos haciendo figuras, movimientos y trucos aumenta nuestro auto-conocimiento, lo que sabemos de nuestro propio cuerpo. El Pole nos ayuda enormemente a ver que nuestros límites están más allá de lo que pensábamos, que podemos hacer cosas increíbles con él y que es una pieza clave en nuestra salud física y mental. En definitiva, el Pole Dance también es una maravillosa terapia positiva para el amor propio.